28/08/1920. La Butte (Bélgica)
Dinamarca 0 - 1 España
Otero
Arrate
Samitier
Belauste (cp)
Eguiazábal
Pagaza
Patricio
Sesúmaga
Pichichi
Acedo
'54 Patricio El debut de la selección española
Primer partido de la Selección (formada completamente por jugadores del norte de la península: ocho vascos, dos catalanes y un gallego) e inicio de la leyenda internacional de Ricardo Zamora, que fue el verdadero artífice de la victoria.
El estadio de La Butte, campo de la Royale Union SaintGilloise de Bruselas, emplazado en un bello marco natural rodeado de árboles, se encontraba en inmejorables condiciones para la práctica del fútbol.
La lluvia caída poco antes del inicio del partido no impidió la masiva afluencia de público y los dos equipos saltaron al terreno de juego entre ovaciones.
Primero lo hicieron los favoritos daneses, que habían sido subcampeones en las dos anteriores olimpiadas celebradas en 1908 y 1912. Poco después apareció el equipo español, vistiendo camiseta roja, color que sería habitual desde entonces.
Sacaron de centro los españoles, pero el primer ataque peligroso correspondió a los escandinavos. La superior técnica de los daneses fue contrarrestada por el coraje y la velocidad que imprimiron a su juego los españoles.
Los ataques se sucedieron en una y otra portería. Marcó Patricio, pero el tanto fue anulado por fuera de juego. Aunque la primera mitad acabó sin que el marcador se hubiera movido, el juego había sido intenso y emocionante y el público lo agradeció con una fuerte ovación cuando los equipos se marcharon al vestuario.
Patricio Arabolaza, delantero centro del Real Unión, marca el primer gol en la historia de la selección (' 54)
EL PRIMER GOL. Comenzó la segunda parte con ataque español y a los nueve minutos el delantero centro Patricio Arabolaza, de tiro raso y cruzado junto al palo, consiguió el histórico primer gol para el equipo nacional español, en jugada de Pagaza que nació en las botas de Belauste.
A partir de aquí, el dominio fue claro de los daneses que buscaron la igualada en el marcador, pero la excelente actuación de la defensa española y, sobre todo, del portero Zamora, que estuvo inconmensurable en los últimos veinte minutos, consiguieron mantener el resultado favorable hasta el final del encuentro, a pesar de la lesión de Samitier que hubo de ausentarse del terreno de juego un cuarto de hora y volvió sin haberse recuperado. La alegría del equipo español por la victoria fue indescriptible y Ricardo Zamora salió del campo a hombros.
Crónica furiaroja.com
» La selección española en los Juegos de Amberes
